Esta es la presentación que mi compañera Chandra y yo hicimos el día 4 de octubre 2025 en Feminist Question Time, de WDI, y que podéis ver aquí. Está en Mis Artículos porque es un trabajo conjunto de las mujeres de la asociación Femina Helvetica, de la que soy miembra fundadora y copresidenta. Mi compañera no puede dar la cara porque es madre soltera y teme por su trabajo.

En Suiza también ha ganado popularidad el discurso a favor del concepto de «identidad de género», que ha sustituido a la realidad del sexo en determinados ámbitos. En consecuencia, hemos sido testigos de cómo los hombres han entrado en espacios y grupos que antes estaban reservados a las mujeres.

A pesar de que el Código Penal suizo garantiza la separación entre hombres y mujeres en las instituciones penitenciarias, en 2022 un hombre ingresó en una prisión para mujeres en Zúrich. El lobby trans logró que el Centro Suizo de Competencia para la Ejecución de Sanciones Penales publicara un documento sorprendente que permite a las personas elegir en qué prisión ser recluidas en función de su «identidad de género autodeclarada». Mientras que los medios de comunicación suizos alemanes informaron de que las mujeres se oponían a la presencia del hombre en su prisión, los medios suizos franceses afirmaron que no había ningún problema.

Los hombres han entrado en las comunidades lesbianas. Las organizaciones LGBTIQ+ se niegan a debatir esta violación. En consonancia con el concepto de «identidad de género», se ha invitado incluso a hombres a intervenir en una conferencia de lesbianas en Lausana y en un pódcast de lesbianas en la televisión suiza. La organización nacional que agrupa a las lesbianas, LOS (Lesbian Organisation Switzerland), ha permitido que estos hombres desfilen junto a ellas en las manifestaciones de lesbianas.

En cuanto a los refugios para mujeres, aunque no hemos oído hablar de ningún hombre alojado en ellos, una organización de Berna que trabaja para proteger a las mujeres contra la violencia doméstica ofrece ahora servicios, como una línea de ayuda, a personas intersexuales y a quienes afirman tener una identidad transgénero. Nos pusimos en contacto con ellos y nos enteramos de que actualmente están debatiendo la posibilidad de alojar a personas que dicen ser transgénero en refugios para mujeres.

En el ámbito deportivo, un hombre suizo participó en el campeonato mundial de judo femenino para veteranas en Marrakech en 2019 y ganó. Otro hombre participó en una carrera ciclista femenina en Zúrich en 2023 y ganó. Algunos clubes deportivos, como la Asociación Suiza de Hockey, han abierto sus puertas a los hombres que desean entrenar con el equipo femenino. Algunos periodistas varones de la prensa suiza han elogiado a los hombres que compiten en deportes femeninos.

El concepto de «identidad de género» también se ha extendido a las escuelas, donde ahora se afirma al alumnado que se identifica como «transgénero». Esto significa que pueden cambiar de nombres y pronombres, y utilizar los baños, vestuarios y dormitorios del sexo opuesto, sin necesidad de informar o solicitar el consentimiento de sus progenitores.

Uno tras otro, los cantones suizos han elaborado directrices destinadas a formar al personal escolar en el proceso «transafirmativo». Zúrich comenzó en 2020, seguido de Vaud en 2021, Valais en 2022 y Basilea en 2024. Ginebra cuenta con directrices desde 2020, pero las ha estado revisando debido a la oposición de los progenitores. No obstante, sabemos de progenitores que han perdido la custodia de sus hijos e hijas por negarse a afirmar su «identidad trans». Estos casos nunca salen en las noticias, por lo que nadie los conoce.

Las escuelas acogen a asociaciones LGBTIQ+ para que den charlas y promuevan el concepto de «identidad de género». La mayoría de los progenitores desconocen su presencia en las escuelas.

A raíz de la promoción de la «identidad de género» por parte de las escuelas, los hospitales están proporcionando hormonas y cirugías a menores, así como a adultos.

Suiza cuenta con cinco clínicas pediátricas de género, lo que es un número muy alto para un país tan pequeño. Los datos muestran un aumento en el número de niñas que se someten a mastectomías dobles, incluidas menores de edad. Entre 2018 y 2021, 10 niñas menores de 15 años se sometieron a una mastectomía doble electiva. En 2023, 32 niñas menores de 18 años se sometieron a esa intervención, incluida al menos una niña menor de 15 años. Desde 2016, el número de mujeres menores de 25 años que se someten a mastectomías ha aumentado a un ritmo alarmante. No disponemos de datos sobre las personas que toman hormonas del sexo opuesto o bloqueadores de la pubertad. Por lo tanto, no sabemos cuántas hay, lo cual es bastante sorprendente en la era de la recopilación de datos.

En los espacios públicos, los transactivistas han tenido un gran éxito en la «desgenerización» de las instalaciones públicas, en particular los baños y vestuarios de mujeres, mediante la eliminación de la señalización específica de cada sexo. La nueva tendencia de los baños unisex está ganando terreno; tal es ya el caso en las universidades de Lausana y Ginebra. De todos modos, los baños segregados por sexo ya no se respetan, ya que la noción de «identidad de género autoproclamada» tiene ahora prioridad sobre el sexo. En consecuencia, se ha convertido en algo habitual ver a hombres entrando en las instalaciones femeninas en determinados lugares.

El lobby trans ha fomentado un nuevo lenguaje que se centra específicamente en la palabra «mujer». La sustituyen por expresiones deshumanizantes que reducen a las mujeres a partes del cuerpo, como «persona con vulva» o «persona que menstrúa». La televisión suiza ha utilizado estas expresiones.

Para demostrar su compromiso con la causa, las empresas suizas pueden comprar una etiqueta LGBTI. Swiss LGBTI Label les promete un aumento tanto de su atractivo como empleadores como de su imagen como organización.
Esta asociación vende la etiqueta y la formación. A cambio, las empresas deben cumplir diversas exigencias, tanto lingüísticas como organizativas. Así, el lenguaje impuesto llega a todos los aspectos de la vida de la empresa.

Otra asociación, Rainbow Cities Switzerland, tiene como objetivo involucrar y conectar a funcionarios civiles de las administraciones locales, responsables políticos y expertos de todo el mundo con el fin de facilitar e incluir políticas LGBTI en todos los niveles de la sociedad.

Nos preocupa especialmente que las instituciones suizas cambien sus políticas para basarlas en el concepto de «identidad de género autodeclarada» en lugar del sexo. La Oficina Federal de Estadística y la Fundación Nacional Suiza para la Ciencia ya están funcionando de esta manera.

El sistema suizo de autoidentificación es diferente al de otros países, ya que la identidad de género no está reconocida por la ley. En su lugar, las personas cambian su sexo legal. Desde 2022, los ciudadanos pueden cambiar su «sexo legal» en el registro civil con una simple declaración por 75 francos suizos (unos 80 euros). No se necesitan requisitos adicionales. La opción de registrar la «identidad de género» como sexo es un paso más hacia la eliminación del sexo como hecho biológico.

Cuando se aprobó esta ley, no hubo cobertura mediática alguna. Toda la atención se centró en el matrimonio homosexual y en una ley relacionada con la pandemia, por lo que no hubo debate público al respecto. Incluso hoy en día, la mayoría de la gente no sabe que existe.

Y aquí es donde entramos nosotras.

En marzo de este año, un grupo de mujeres se unió para crear una asociación que defendiera los derechos de las mujeres basados en el sexo. Femina Helvetica se puso en marcha el 1 de octubre y, aunque nuestra página web sólo está disponible en alemán por el momento, pronto habrá versiones en inglés y francés. Contiene un análisis en profundidad de los últimos acontecimientos sociales y políticos en Suiza.

Estamos dispuestas a luchar por los derechos de las mujeres a la dignidad, la privacidad, la igualdad y la seguridad, y a garantizar que estos derechos se respeten tanto en la legislación como en las políticas públicas. Todas las mujeres son bienvenidas a unirse a nosotras. Somos una organización dirigida por mujeres y todas nuestras miembros activas son mujeres.

Tenemos el dudoso honor de ser la única asociación realmente feminista en Suiza.

Nos podéis encontrar en X aquí y en Instagram aquí.