Los planes para alentar a más gente a denunciar a la policía crímenes de odio contra las personas trans podrían criminalizar a humoristas como Ricky Gervais, avisan los activistas.
El Ministerio del Interior está elaborando una nueva estrategia de delitos de odio que tiene como objetivo «aumentar la denuncia de todas las formas de delitos de odio», incluidas las relacionadas con la identidad de género.
Aquellos a favor de las propuestas, que acabarían con estos «delincuentes» acusados de «incidentes de odio no criminales», esperan que la gente se sienta más protegida.
Pero los activistas de la libertad de expresión temen que la nueva campaña pueda acabar con humoristas criminalizados por contar chistes, sobre todo si éstos tratan sobre el aumento de la ideología transgénero.
Los planes se están desarrollando a pesar de un fallo judicial el año pasado, que ordenó a la policía dejar de registrar las opiniones críticas de género como incidentes de odio no criminales, que son declaraciones de conducta indebida que se agregan a los antecedentes penales de alguien.
Anoche, Sarah Phillimore, abogada del grupo de campaña Fair Cop, dijo que los planes de los ministros ignoraban el fallo del Tribunal de Apelaciones y podrían poner a la policía en conflicto con la ley.
Dijo: «Estos planes sugieren que el Gobierno no está prestando atención, o que desprecia el Tribunal de Apelación. De cualquier manera, es sorprendente que los legisladores estén planeando expandir la práctica desacreditada e ilegal de registrar incidentes de odio no criminales [NCHIs]. Tras la victoria de Fair Cop en el Tribunal de Apelación en diciembre, la Policía prometió publicar una guía revisada sobre delitos de odio para fines de mayo de este año. Todavía estamos esperando. Las fuerzas policiales que registran quejas contra humoristas, o cualquier otra forma de expresión legal como NCHIs estarán acumulando ilegalidad sobre ilegalidad.
«Se van a encontrar un día en los tribunales sin legítima defensa. Esta estrategia quijotesca rezuma arrogancia, como si la ley no fuera aplicable si estás luchando en «el lado correcto de la historia».
«Pero, ¿cómo puedes estar en el lado correcto de la historia si estás repetidamente en conflicto con la ley?»
La medida se produce después de que Gervais, creador de The Office, enfureciera a la brigada ‘posmolerda’ de Twitter con la emisión de su nuevo especial de Netflix, SuperNature, que se burla de la cultura de la cancelación con chistes sobre personas trans, Hitler y el SIDA.
El cómico, de 60 años, comienza el programa describiendo lo que es comedia a la audiencia como «básicamente un tío que habla», para luego no recordar deliberadamente a ninguna «cómica divertida». En un sketch dice: «Lo peor que puedes decir hoy es: ‘Las mujeres no tienen pene’, ¿verdad?»
El programa ha provocado una reacción violenta de los grupos LGBT, que han acusado a Gervais de crímenes de odio.
Bajo la nueva estrategia que está elaborando el Gobierno, se podría permitir a los miembros del público registrar una queja oficial por su espectáculo.
Anoche, la ministra del Ministerio del Interior, Rachel Maclean, insistió en que la medida era positiva. Ella dijo: «Los aumentos en los delitos de odio registrados por la policía han sido impulsados por mejoras en el registro de delitos, una mejor identificación de lo que constituye un crimen de odio y una mayor disposición de las víctimas a denunciar.
«Esto es positivo y refleja el arduo trabajo que se ha realizado para garantizar que la policía pueda comprender la magnitud del desafío y que las víctimas reciban el apoyo que necesitan».