Estados Unidos — Seattle, Washington. Allison Woolbert fue un prominente activista transgénero, es un veterano de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos y un pederasta convicto.
A los 28 años, cuando todavía se le conocía legalmente por el nombre que se le dio al nacer, Dennis, el Sr. Woolbert violó repetidamente a una familiar, una niña de 15 años. Las agresiones sexuales ocurrieron durante un período de dos meses en 1992.
Después de cumplir cuatro años de prisión de una condena de seis por el crimen, Woolbert salió de la cárcel y se declaró mujer. Cambió su apariencia para imitar mejor la de una mujer, y se empezó a llamar Allison.
En el momento de la sentencia del Sr. Woolbert, la ley estatal de Nueva Jersey aún no exigía que los delincuentes sexuales se registraran como tal. Por lo tanto, el Sr. Woolbert no aparece en ningún registro de delincuentes sexuales, lo que permitió que su historial de violencia sexual hacia un menor pasara desapercibido durante años.
El Sr. Woolbert ascendió al cargo de Director Ejecutivo del Transgender Human Rights Institute (THRI), y fundó Transgender Violence Tracking Portal (TVTP) y TERF Tracker.
En su posición en THRI, el Sr. Woolbert abogaba por jóvenes que se identificaban como transgénero, lo que le daba un acceso mucho mayor a menores que cualquier persona normal.
Según Gender Trender, como «rastreador de terfs», Woolbert y sus compañeros varones que se identifican como transgénero Laurelai (nacido Wesley) Bailey y Melissa (nacido Harrison) Savage se unieron para acosar cibernéticamente a las mujeres que sospechaban que tenían claro que hay dos sexos y que los humanos no pueden cambiar de sexo.
Este trío de hombres tomó la decisión de controlar a las que les dio al «me gusta» a publicaciones con las que no estaban de acuerdo, informó Gender Trender. Estos hombres llamaron a esas mujeres «TERF» y revelarían online la información necesaria para la identificación personal de estas mujeres en un ataque conocido como «doxxing», señaló Gender Trender.
Bailey y Emmagene Cronin, dos periodistas varones que se autoidentifican como mujeres, dijeron que descubrieron los antecedentes penales de Woolbert mientras investigaban las operaciones de THRI.
Desprestigiado y humillado, el Sr. Woolbert dimitió de THRI.
Al principio, THRI se negó a aceptar la dimisión del Sr. Woolbert. La organización argumentó que la gente se estaba metiendo injustamente con el Sr. Woolbert al mencionar su condena por pederasta violento, una historia que THRI creía que ya no era relevante. Como el rechazo público persistió, la organización permitió que Woolbert renunciara sin más demora.
A continuación están los documentos judiciales relacionados con el juicio de Dennis Woolbert, obtenidos por Gender Identity Watch.
En otras fuentes:
La renuncia de Allison Woolbert: una lección objetiva sobre el valor de una investigación exhaustiva de antecedentes.