JP — Suminoe-ku, Osaka. El jueves, un hombre de 48 años compareció ante el fiscal bajo sospecha de allanamiento de morada después de haberse metido en un baño de mujeres a plena luz del día travestido. El hombre, un trabajador de mensajería, inicialmente afirmó identificarse como una mujer, pero luego confesó que se travestía a menudo como un «pasatiempo» y se mostraba «excitado» de cumplir su fantasía de estar «en un baño de mujeres vestido de mujer».
El año pasado, en la mañana del 24 de septiembre, Katsufumi Miura se vistió con «una minifalda, una membrana impermeable médica transparente que cubría su pene, maquillaje y una peluca hasta los hombros» y entró en la sección femenina de Kutsurogi no Sato Yuraku, una fuente termal natural para adultos y niños en la ciudad de Osaka.
El personal del spa que lo vio sospecharon inmediatamente de la «persona rara».
Había cinco clientas en el baño cuando el Sr. Miura se quitó todo menos la membrana que cubría sus partes pudientes.
La recepción fue alertada de la presencia de una persona de aspecto masculino en el baño de mujeres. Un empleado fue a verificar y encontró a un hombre sonriendo sentado en el borde de la bañera, mirando a su alrededor en la casa de baños.
Cuando llegó la policía, el Sr. Miura dijo: «Mi género es masculino, pero mi corazón es femenino».
La policía dijo que decidió no detener a Miura mientras procedía cuidadosamente con la investigación, ya que Miura había cooperado en la entrevista y se había puesto una peluca y una minifalda para ir a la estación Suminoe de la policía de la prefectura de Osaka.
Miura más tarde cambió su declaración, diciéndole a la policía: «Quiero ser visto como una mujer, pero no soy una mujer de verdad» y «No soy LGBT». Dijo que se travestía porque «no me pueden obligar a hacer un trabajo pesado, y es más fácil y más rentable vestirse de mujer».
Según la policía, el Sr. Miura procedió a hacer declaraciones incriminatorias. «Quería ir al baño de mujeres como mujer. Siempre he querido ir al baño de mujeres, y hoy pensé que no me iban a coger ni siquiera en el al baño de mujeres porque podía esconderme detrás de una buena tapadera frontal».
Además, admitió: «Quería asegurarme de que mi tapadera fuera perfecto al entrar en un baño de mujeres, y estaba excitado de verme en un baño de mujeres vestida de mujer».
El periódico japonés Nikkan Gendai especuló que Miura, que «solo está interesado en las mujeres y no en los hombres», entró en la casa de baños para hacer cosas de «pervertido». Excite calificó de «vergonzoso» que Miura hubiera «fingido ser transgénero para satisfacer sus propios deseos».
Kutsurogi no Sato Yuraku cerró permanentemente sus puertas en septiembre pasado.
Un comentario
Muy bueno, Nuria, como siempre, gracias por tu buen trabajo.
Hiela la sangre la actitud de hombre como este, que sabemos no son casos aislados.