Cuatro amigos que drogaban a sus esposas, miraban cómo violaban a las parejas de los demás y se felicitaban mutuamente por «montar un buen espectáculo» se enfrentan a penas de cárcel en Singapur.
Una mujer fue violada varias veces durante un período de al menos siete años por diferentes hombres mientras estaba inconsciente, después de que su marido la drogase y le vendase los ojos, informa Channel News Asia.
El caso se descubrió cuando la mujer encontró fotos de sí misma desnuda en un chat en el teléfono de su marido.
Los cuatro hombres, que están bajo secreto de sumario impuesto por el tribunal, se declararon culpables el lunes de dos cargos de conspiración para violar, y varios otros cargos fueron tomados en consideración.
Son K, M, L y N.
Según Channel News Asia, el principal cómplice de los casos es un quinto hombre, J, que se casó con su esposa en 2008 y con quien tiene cuatro hijos.
El tribunal escuchó que los hombres conocieron a sus respectivos cómplices en línea en 2010, en el foro Sammyboy, así como en otras plataformas dedicadas a compartir fantasías de esposas.
Conversaron sobre tales fantasías, intercambiaron detalles de sus vidas sexuales y compartieron imágenes explícitas entre sí.
J, de 41 años, había intentado previamente que su esposa viera videos pornográficos para tantear si accedería a un trío.
Su esposa dijo que estaba completamente en contra de la idea.
Después de esto, J supuestamente ideó un plan para sedar a su esposa para que otros hombres tuvieran relaciones sexuales con ella.
J conoció a K, de 44 años, que estaba casado, no tenía hijos y trabajaba en desarrollo empresarial, en Sammyboy de 2010 a 2011.
Acordaron darles tranquilizantes a sus esposas para permitir que otros hombres las violaran.
Después de investigar un poco, se decidieron por un medicamento que podía dejar inconsciente a una persona.
K puso la droga que J había adquirido en la copa de su esposa en algún momento antes de 2012.
Cuando ella perdió el conocimiento, le vendó los ojos y le dijo a J que viniera a su casa.
J luego violó a la esposa de K mientras K miraba y hacía fotos. Repitieron este acto en 2012.
En febrero de 2013, la esposa de J comentó que se sentía enferma y J aprovechó esta oportunidad para darle la droga y dejar que K la violara.
J instaló una cámara de televisión de circuito cerrado en su dormitorio para transmitir en vivo imágenes de su esposa desnuda y retransmitir su vida sexual.
K también transmitió en vivo desde una cámara web en su habitación.
Los fiscales dijeron que después de ver esto, los hombres a veces se felicitaban mutuamente por haber montado un «buen espectáculo».
Los dos hombres seguían compartiendo imágenes de agresión sexual y violación y «continuaron rememorando» sus actos, dijo la fiscalía.
Estas conversaciones llevaron a la esposa de J a descubrir en enero de 2020 lo que había pasado.
J estaba dormido cuando su esposa encontró un video en su teléfono y luego su conversación de Skype con K.
Los mensajes contenían imágenes explícitas de ella y algunos mensajes más antiguos mostraban que los hombres habían estado intercambiando a sus esposas para violarlas.
La mujer de J lo despertó, y él borró los chats incriminatorios y fue a la casa de K con su esposa como ella había solicitado.
Durante la conversación, K dijo que había tenido relaciones sexuales con la esposa de J mientras ella estaba inconsciente.
K también admitió haber dejado inconsciente a su propia esposa para que J pudiera tener relaciones sexuales con ella.
La esposa de J presentó un informe policial el 2 de enero de 2020.
Las imágenes y fotografías confiscadas por la policía de los dos hombres dieron como resultado la identificación de otros que participaron en esas actividades.
Otro hombre en el grupo, L, de 52 años, que era gerente de desarrollo empresarial y tenía tres hijos con su esposa, conoció a K en línea entre 2010 y 2011 y luego a J.
J sedó a su esposa en 2013 para que L la violara mientras J grababa.
M, de 45 años, que era director de una compañía y tenía tres hijos, conoció a J en Sammyboy en 2010.
Ese mismo año, J le dio a su esposa una droga después de que ella dijese que se sentía enferma y, cuando estaba inconsciente, J llamó a M par que fuera a violar a su esposa.
El cuarto hombre, N, de 37 años, era un repartidor de alimentos y violó a la esposa de J entre 2017 y 2018.
Los fiscales que supervisaron los casos pidieron una sentencia de prisión de entre 19 y 23 años y 24 golpes de bastón para K y M.
Pidieron de 11 a 16,5 años de prisión para L, y otros seis meses de prisión en lugar de azotes.
También pedirán de 17 a 21 años de prisión y 24 golpes de bastón para N, que no tenía pareja, informó Channel News Asia.
