El sistema penal debe respetar el derecho a la privacidad de los acusados transgénero e incluir restricciones a la información que revele el nombre que se les dio al nacer y su historial de cambio de «género», según las últimas directrices oficiales.
El ‘Equal Treatment Bench Book’ es un documento de 540 páginas elaborado por el Colegio Judicial, que tiene como objetivo «aumentar la concienciación y la comprensión de las diferentes circunstancias hacia las personas que comparecen en los juzgados y tribunales».
Su última revisión aconseja a los tribunales que eviten el uso de lenguaje y pronombres de género siempre que sea posible, informa The Times.
También plantea el escenario de un delincuente que ha cambiado de género y su derecho a ser tratado por el tribunal utilizando con su pronombre preferido.
La guía decía: «Puede haber situaciones en las que los derechos de un testigo a referirse a una persona trans con los pronombres que coincidan con su género asignado al nacer, o a revelar de cualquier forma el estado trans de una persona, choquen con el derecho de la persona trans a la privacidad».
Continuó: «En las raras circunstancias en las que sea necesario para el proceso revelar el nombre anterior y el historial transgénero de una persona, el tribunal puede considerar hacer restricciones en los informes para evitar la divulgación de esta información, o puede incluso celebrar una vista privada».
La presidenta del Tribunal de Apelación, Lady Justice King, dijo que la guía es un «documento dinámico» que ha servido como una referencia clave para los tribunales y ha sido «admirado y envidiado por los poderes judiciales de todo el mundo».
Entre sus sugerencias para un lenguaje más neutral, el colegio aconseja a los jueces que usen el término «auxiliar de vuelo» en lugar de «azafata» y «dirección» en lugar de «director». (Chair en vez de chairman)
«Es importante respetar la identidad de género de una persona mediante el uso de términos apropiados para referirnos a ellos, incluidos nombres y pronombres. Toda persona tiene derecho al respeto de su identidad de género, de su vida privada y de su dignidad personal», añade.
La guía también declaró: «El término queer está ganando rápidamente aceptación como un término general para aquellos que no son estrictamente heterosexuales o cisgénero (es decir, se identifican con su género de nacimiento).
Stonewall advierte que el término queer ha sido recuperado por los jóvenes en particular que no se identifican con las categorías tradicionales en torno a la orientación sexual y / o la identidad de género.
«También se ha asociado con varios movimientos artísticos y culturales en todo el mundo, y ha entrado en el discurso académico.
«Sin embargo, [el término queer] todavía es considerado despectivo por algunas personas en las comunidades LGBT, y por lo tanto debe evitarse».
En los casos penales relacionados con la violencia contra las mujeres, el colegio declaró: «Algunas personas se oponen al término «víctima», ya que puede implicar pasividad e impotencia. Pueden preferir la palabra «sobreviviente» que puede transmitir resiliencia».